ENTREVISTA MANEL SOTO, GERENTE DE CAYPI
Realizar una inversión tan fuerte en una coyuntura económica como la actual no resulta habitual. Hemos querido saber los motivos que han llevado a Caypi ha hacerlo, y para ello hemos charlado con su gerente, Manel Soto.
¿Porqué invierten en tiempos de crisis como los actuales?
Personalmente, creo que es en estos momentos cuando hay que invertir, puesto que si se ha estudiado bien la viabilidad, no hay por qué preocuparse. El problema es invertir cuando la situación es favorable, ya que entonces el más mínimo revés puede hacer que los números no cuadren.
¿Cómo les ha afectado la crisis?
Vivir desde pequeño conociendo la realidad de la empresa hizo despertar mi interés por este negocio y el deseo de darle una continuidad al proyecto iniciado por mi progenitor. Además, la satisfacción de dedicarse a lo que uno realmente le gusta es una fuente de motivación extra.
¿Qué considera que puede aportar a la empresa?
En este apartado y desde el punto de vista de Caypi, debemos diferenciar dos aspectos: el primero de ellos es que la crisis nos ha afectado negativamente en forma de fuertes descensos en la producción, lo que llegó a hacer que nos planteáramos seriamente el futuro de la empresa. El segundo aspecto, que está estrechamente ligado con lo que acabo de explicar, es que fue esa misma situación la que favoreció que los socios de Caypi llegáramos a un acuerdo en 2009 para la fusión de tres sociedades, lo cual supuso un cambio radical en nuestra compañía.
Los empresarios habitualmente se muestran descontentos ante las dificultades para iniciar nuevos proyectos, ¿qué opina usted?
Pues que debo corroborar sus palabras y decirle que nos hemos encontrado con todas las dificultades y problemas que se pueda imaginar. La lentitud burocrática de algunos temas competencia de la administración ha ralentizado el inicio de este proyecto, y eso nos ha supuesto importantes problemas al no poder cumplir los compromisos con empresas de automoción. No obstante, la situación cambia a nivel local, y es justo destacar que hemos podido contar con la colaboración y el apoyo del ayuntamiento de Sant Fost de Campsentelles, tanto por sus dirigentes como por su personal técnico.
En lo que se refiere a la financiación, ¿han tenido apoyo de las entidades bancarias?
En este aspecto debo reconocer que no hemos tenido muchas dificultades y que ha sido relativamente sencillo el acceso al crédito bancario. El secreto es que tenemos una imagen de seriedad para la banca que hemos cultivado desde hace años y que hace que nos respeten mucho. Además, mi política en este sentido ha sido siempre la de avalar con todo mi patrimonio para demostrar a las entidades financieras que confío plenamente en mis proyectos.
¿Qué diferencia a Caypi de sus competidores?
No sé si es exactamente un factor que nos diferencia, pero nuestro lema recoge muy bien la filosofía de la empresa: “Flexibilidad, fiabilidad y rigor”. Eso es lo que intentamos ofrecer a nuestros clientes. Si hablamos a nivel técnico, podemos decir que actualmente ofrecemos varios procesos como son el granallado, los cincados, la pintura por cataforesis, las pinturas en polvo y todo tipo de manipulados, lo que nos convierte en un proveedor global con sinergias favorecedoras para nuestros clientes, que simplifican la gestión de varios procesos con sólo un interlocutor.
¿Cómo ve usted el futuro?
Aunque ciertamente el momento actual es sumamente complicado, mi visión del futuro es optimista. Quizás incluso pueda parecerlo demasiado, pero es lo que siento. Nuestro sector principal es la automoción, y todo el mundo sabe que está inmersa en una gran crisis, especialmente por el descenso de las ventas. Si embargo, si leemos la prensa y al mismo tiempo analizamos las ofertas que nos han solicitado en los últimos meses, no hay más remedio que ser totalmente optimistas, ya que prácticamente todas las factorías de España tienen asignados nuevos modelos de automóviles para el próximo ejercicio, y están realizando inversiones muy importantes.
Es decir, que habrá actividad en las plantas de producción españolas…
Así es. Pero es que hay que añadir que este aumento de la fabricación de vehículos va a coincidir con una disminución del parque de proveedores en nuestro sector, puesto que la fuerte crisis ha hecho que muchos negocios hayan tenido que cerrar sus puertas. Eso hace que los que hemos logrado subsistir podamos acceder a más proyectos. Además, si los que seguimos operativos continuamos apostando por mejorar nuestra tecnología y nuestras instalaciones, el resultado debería ser satisfactorio.
¿Qué objetivos tiene Caypi?
En estos momentos Caypi ya ha logrado unos de sus principales objetivos y uno de los que más me preocupaba, que no es otro que la continuidad de la empresa. Hemos conseguido poner al frente de la sociedad a un directivo preparado, tanto a nivel académico como a nivel práctico, que era lo más complicado, y ello nos permite garantizar a nuestros clientes nuestra continuidad en un futuro a largo plazo.
¿Y a nivel de mercado?
En términos económicos y de mercado, Caypi se plantea seguir creciendo e innovando, y sobre todo, seguir añadiendo nuevos procesos a los ya existentes. En este sentido, actualmente tenemos en estudio un proyecto tecnológicamente muy avanzado que se realiza en Estados Unidos y que sería totalmente innovador en nuestro país, pero del que no puedo desvelar nada más. Además de este proyecto, estamos estudiando la posibilidad de adquirir alguna empresa del sector con procesos complementarios a los nuestros, o bien incorporar dichos procesos con la adquisición de nuevas instalaciones.